jueves, 9 de febrero de 2017

DESAHOGO

Tras muchos días sin posibilidad de conectarme, hoy jueves 9 de febrero, he conseguido un puesto con internet en la Biblioteca del pueblo. Ah! Buenas tardes que no he dicho nada.
Es tan solo una sensación, creo que la Vida se mofa de la situación en la que me encuentro. Se me rie en los morros, me vacila. ¿Es posible, en el mismo mes olvidarse de fichar el paro, que te inmovilicen el coche, que te tiren de tres ofertas de empleo, 2 de ellas de discapacitado, que te llegue un aviso de corte de agua, y quedarte peñao? Esto último es lo que me falta, y a día 9 que estamos.
Por el lado positivo he de decir que Francisco Javier ha aprobado los exámenes que ha hecho hasta ahora en esta segunda evaluación, que he conseguido arreglar el coche a cambio de 300€ que me he quitado de la nevera, que Anabel me sigue queriendo (y cada vez lo entiendo menos, el pan y la cebolla queda muy bien en las novelas), y nada más. Todo lo demás son promesas y espectativas a medio plazo.
Pasado mañana, una persona que conozco cumple un añito más, que se sumará a los 42 que ahora tiene. No creo que pueda felicitar a esta persona, ya que desapareció de mi vida cuando quiso. Y espero que haya sido por voluntad propia y no por presiones, por que si por estas segundas fuera, sería aun más triste. El desapego llegó a raiz de mi hundimiento económico, !ojos que no ven y oidos que no oyen!
Entiendo que todo aquel que me lee, espera que un día dé una buena noticia y olvidemos todos estos escritos tan tristes y lamentables que, para propio desahogo, me veo obligado a escribir. No está en mi ánimo tocar conciencias, ni corazones, ni ablandar bolsillos, en serio. Necesito despotricar, soltar todo lo que me molesta, me quema y me ahoga. No soy tonto, si a raiz de estos gritos alguien se  ofrece, yo no le cierro las puertas. Todo esto ¿a qué viene? Para aclarar a esa persona que se ha descolgado tan descaradamente de mi vida, a pesar de las últimas palabras que me escribió, que no espero nada de nadie. Que ya me hundo yo solito sin ayuda. Que ese portazo en las narices, me ha pillado una mano, pero me ha abierto los ojos y endurecido lo suficiente como para seguir con más ganas hacia alante. Cada NO lo convierto en dos SI. Cuando me cierran la puerta, no se dan cuenta que los se encierran son ellos, ya que el que está fuera soy YO. Tengo el aire y el Sol. Lo malo de la hipocresía es que nos viste con cuello almidonado y nos pica el cuello, por eso se va tan estirado por la vida.
!Tanto tienes, tanto vales! !Qué verdad y qué cierto!
Ni debo ni quiero entrar en detalles. El sábado tengo que seguir yendo al Banco de Alimentos, y gracias al malogrado arreglo del coche (me lo han inmovilizado por tener el seguro caducado), dependo durante todo el mes de lo que buenamente me quieran dar, he quemado todas las naves que tenía para cruzar este trayecto llamado mes. Es acostumbrarse.
Lo malo de estas situaciones es que nunca sabes ni cuándo ni como vas a estallar, ni contra quién. Tengo en mente varias acciones, pero las cosas que se piensan no suelen salir bien. Así que he de controlar mucho los nervios. Según me dicen, los que me conocen bien, tengo mucha paciencia, demasiada quizás; lo malo es que acumulo mucho en lo adentros y esto me perjudica. Y yo digo que al que esté alrededor cuando yo reviente, le va a sentar peor que a mí, porque...
En Paterna ha petado un fábrica, en Francia una explosión en una central nuclear. La próxima explosión puede ser en El Casar de Escalona. Estar atentos a las noticias por si acaso.

No hay comentarios:

Publicar un comentario